Restaurante Lasarte de Barcelona
Un combinado de lujo, la cocina de Martín Berasategui en la Barcelona de Gaudí
La arquitectura modernista de Gaudí y la cocina fusión de Martín Bersategui reunidas en el mágico y distinguido entorno del distrito del Eixample de Barcelona. El resultado: una experiencia enriquecedora para el paladar y para el conocimiento del arte catalán.
El Restaurante Lasarte del Hotel Condes de Barcelona abrió sus puertas en enero de 2006, en un emplazamiento privilegiado inmerso en uno de los distritos que han otorgado el carácter arquitectónico modernista excepcional de la ciudad de Barcelona, el Eixample.
La zona, reconocida mundialmente, está presidida por el elegante y glamuroso Passeig de Gràcia, un paseo recorrido por miles de visitantes cada año que acoge establecimientos de prestigiosas marcas y edificios de diseño único.
Lasarte, en Barcelona, se sitúa en la calle Mallorca tocando al Passeig de Gràcia, y añade al lugar un toque más del lujo y la distinción que se respiran en toda la zona.
La Barcelona moderna nació en el Eixample, ideada por el ingeniero y urbanista a quien debe su diseño único: Ildefons Cerdà. El distrito es fruto de uno de los momentos más esplendorosos de la historia de la ciudad, cuando se configura definitivamente como el motor de la Catalunya contemporánea y rompe con el pasado medieval destruyendo las murallas a mediados del siglo XIX. La mejor expresión creativa de este momento es el estilo arquitectónico modernista que impregna el distrito, con una acumulación de edificios de gran valor patrimonial que, bajo el reinado de la Sagrada Família, lo convierten en un conjunto sin comparación en Europa.
El Quadrat d'or es la zona del Eixample de Barcelona situada alrededor del Passeig de Gràcia y delimitada aproximadamente por la calle Aribau a la izquierda y el Passeig de Sant Joan a la derecha, limitado por la Diagonal en la parte superior, la cual tiene forma de cuadrado y acoge un rico patrimonio arquitectónico, sobretodo de la etapa modernista.
Se distinguen tres construcciones de importancia mundial que marcan los itinerarios de turistas y visitantes, construcciones modernistas consideradas símbolos de la ciudad.
El Templo Expiatorio de la Sagrada Família, basílica conocida habitualmente como la Sagrada Família, es uno de los ejemplos más conocidos del modernismo catalán y que ha resultado todo un símbolo de Barcelona. Obra inacabada del arquitecto catalán Antoni Gaudí, está situada en el barrio de la Sagrada Família, en el distrito del Eixample de la ciudad.
La Sagrada Família es el monumento más visitado del Estado español, por encima incluso de la Alhambra y el Museo del Prado. En 2008 recibió más de 2,7 millones de visitantes. La obra realizada por Antoni Gaudí, es decir, la cripta y la fachada del Nacimiento, fueron declaradas Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 2005.
La Casa Milà, también conocida como "la Pedrera", es un edificio modernista que se encuentra en el Passeig de Gràcia de Barcelona, esquina con la calle Provença. Fue la última obra civil diseñada por Antoni Gaudí y fue construida entre el año 1906 y el 1910.
Fue un encargo del empresario Pere Milà i Camps y de su mujer Roser Segimon i Artells. En su momento fue muy polémica a causa de las atrevidas formas onduladas de la fachada de piedra y los hierros forjados retorcidos que decoran las balconadas y ventanas, diseñados en gran parte por Josep Maria Jujol, quien también proyectó algunos de los cielos rasos de yeso.
Arquitectónicamente está considerada una obra innovadora al contar con una estructura de columnas y plantas libres de muros de carga.
El año 1984 fue declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
La Casa Batlló es un edificio diseñado por el arquitecto Antoni Gaudí, máximo representante del modernismo catalán, entre 1905 y 1907. Está situado en el número 43 del passeig de Gràcia de Barcelona, la amplia avenida que atraviesa el barrio modernista del Eixample. Fue un encargo de Josep Batlló i Casanovas, un empresario textil vinculado con la familia Godó por matrimonio. Su parte más conocida es la fachada, considerada uno de los más creativos y originales trabajos del arquitecto; combina la piedra, el hierro forjado, el vidrio y la cerámica policromada.
El edificio está abierto al público y el año 2011 recibió unas 600.000 visitas.
El restaurante Lasarte de Martín Berasategui es la opción gastronómica más distintiva de la zona, un elegante y privilegiado establecimiento galardonado con dos estrellas Michelín que acoge unos 30 cubiertos, distribuidos en dos espacios, un comedor principal y uno secundario de carácter más íntimo.
La decoración del establecimiento es exquisita y está presidida por una pared compuesta de una reproducción de adoquines gaudinianos, sin desentonar en absoluto con el carácter modernista del distrito.
El establecimiento dispone de tres espacios que marcan una diferencia en su uso. El espacio que acoge el comedor principal respira un ambiente tranquilo, minimalista, con exquisitos detalles decorativos a base de hierro forjado y unas mesas finamente concebidas para atender a un número reducido de comensales en toda la sala. El resultado es una atención personal inmejorable y un cuidado y mimo excepcionales, por parte de un personal exquisitamente preparado.
En un segundo nivel encontramos un elegante salón que se compone de sofás, mesa central y una vinacoteca, un lugar ideal para charlar con amigos mientras se paladea el vino recomendado por el sumiller en el entorno de tranquilidad, intimidad y armonía que respira la sala.
En un tercer nivel se sitúa un segundo comedor, presidido también por paneles gaudinianos, con un carácter más íntimo y pensado para eventos privados de pocos comensales. Un lugar ideal para celebraciones en un ambiente de elegancia y exclusividad.
La cocina de Martín Berasategui implica, como todos sus establecimientos, exclusividad y continua innovación, y el personal que trabaja en ellos revela el carácter propio de su manera de hacer y de cómo él concibe el arte de servir sus exquisitos platos. Siempre se rodea del mejor personal, tanto de sala como de cocina, y, en este caso, dispone de un joven jefe de cocina, Paolo Casagrande, muy versado en la cocina fusión, capaz tanto de elaborar los clásicos platos estrella Michelín de Martín, cómo de crear y presentar exquisitas novedades especialmente diseñadas para el Lasarte. Toda una promesa que seguro engrosará nuestra lista de chefs internacionales. Como jefe de sala y sumiller, Martín ha apostado por Joan Carles Ibáñez, muy agradable en el trato y preparado para ilustrar en el arte del buen vino al más entendido.
El restaurante Lasarte dispone de tres posibilidades para disfrutar de una comida o una cena. Ofrece una colección de platos a la carta concebidos para ser degustados en 3 ó 4 bocados, ya que de otro modo se perdería el espíritu con el que fueron creados. Encontramos diseños tan exclusivos e innovadores como "gamba roja templada, flan cremoso de erizos de mar, caviar de leche de oveja y almendras", "sopa de jamón ibérico, papada crujiente, calabacines rellenos y galleta de parmesano", "jamón ibérico de Bellota Gran Reserva", "ensalada de verduras, hierbas, brotes y pétalos con crema de lechuga, jugo yodado y bogavante", "rape asado a baja temperatura sobre una cama de cebolleta al pimentón, endivia estofada con tarama de percebes y rocas de aceitunas negras", "solomillo de vaca asado, terrina de patata, tocineta ibérica y salsa de foie gras", "crema helada de cáscara de limón, granizado de manzana verde, infusión ligera al cardamomo sobre un bizcocho de aceite de oliva", entre muchas más creaciones sorprendentes que entrelazan texturas y sabores con una precisión admirable, consecuencia, seguramente, de muchas horas de investigación, ensayos y creatividad, y que resultan en una exquisita gama de productos de la tierra combinados y presentados con la mayor delicadeza y exquisitez.
La segunda posibilidad para el almuerzo de martes a viernes es el Menú Lasarte, un menú elaborado exclusivamente a partir de los platos de Martín Berasategui, una sabia combinación de ingredientes, sabores y texturas dignas de un chef que acumula seis estrellas Michelín, a un precio muy ajustado de 75 euros.
Por último, aconsejamos la tercera posibilidad que se nos ofrece en el Lasarte, el Menú Degustación, una colección de presentaciones culinarias de enorme variedad que combina a la perfección los diferentes componentes de cada creación colmando de sensaciones el paladar y sorprendiéndonos en cada servicio con la belleza estética de cada plato que cuida hasta el último detalle.
Algunas de las creaciones que podemos paladear en el menú degustación:
"Tartare de atún rojo con cuajada de pepino", "Ostra ligeramente ahumada a la parrilla con jugo espumoso de cebolla de Figueres, picadita de calamar y tubérculos crujientes", "Láminas de chuleta de vaca atemperada sobre cuajada de foie gras, ensalada yodada y helado de mostaza", "Gamba, estofado de guisantes, bombón cremoso de tinta y chirivía", "Huevo de caserío con salteado de setas silvestres, jugo perfumado de carnes, papada ibérica y escarchas de queso trufado", " Pichón asado con ragú de cochinillo, tomate y limón con crema de manzana y tosta de sus interiores", "Crema fría de yogurt y remolacha, bizcocho micro de avellana y cacao en infusión de cereales", "Torrija con crema helada de café con leche y ciruelas compotadas", "Petit fours".
El arte de diseñar, el arte de construir, experimentar e innovar, a partir de materiales de la tierra, aderezados con la creatividad de nuestros expertos, Gaudí y Berasategui, ha aportado a nuestro país una distinción de carácter internacional, única, autóctona y con una fuerte carga cultural que nos hace enorgullecernos de nuestros artistas creadores, de nuestra arquitectura y de nuestra gastronomía.
Nuestras felicitaciones al jefe de cocina del restaurante Lasarte de Barcelona, Paolo Casagrande, por su aportación a la alta gastronomía de nuestra tierra y por su dedicación y creatividad, dando como resultado la elaboración de una importante colección de artísticas y deliciosas creaciones dignas de los paladares más exigentes.
Nuestro agradecimiento a todo el personal del restaurante por la magnífica velada que nos brindaron y por el trato recibido .
Agradecemos a Inés Vázquez, Directora de Relaciones Públicas Condes Hotels, y al equipo de Savoir Faire, la oportunidad de conocer, una vez más, otro de los restaurantes de Martín Berasategui.
