Bodegas Ruberte, el Sabor del Campo de Borja
Enero de 2014 - Manuel Medina | Magallón (Zaragoza)
"En Bodegas Ruberte, vino, arte y pasión son las palabras que en nuestra empresa se destacan y todo el que trabaja con nosotros siente eso por el vino". Susana Ruberte pronunciaba estas palabras al recoger en 2009 el Premio a la Excelencia Empresarial. Muchos fueron los reconocimientos previos que esta empresaria y profesional del mundo de vino cosechó años antes, muchos fueron también los que le siguieron y más aún los que les quedan por recibir. No cabe duda, el mundo del vino -tradicionalmente masculino- necesitaba de mujeres como Susana Ruberte que feminizasen este sector. Mayor capacidad creativa, más sensibilidad y una gran agudeza de los sentidos, especialmente los del olfato y el gusto, han hecho que la mujer haya podido incursionar exitosamente en un mundo, hasta hace poco, de exclusivo dominio varonil. Ya era hora. Y la continuidad en el caso de Susana está garantizada: sus hijas Alicia y Ana son, pese a su juventud, herederas por méritos propios de la gran labor desempeñada por Susana. Dos nombres más de mujer que añadir a una lista que deseamos sea cada vez mayor.
Grupo Ruberte engloba varias bodegas situadas en las Denominaciones de Origen Campo de Borja: Bodegas Ruberte y Bodegas La Magallonera en Magallón y Camino al Moncayo en Ainzón, todas ellas en Zaragoza. El Moncayo, cargado de mitos y leyendas, ha sido inspiración desde tiempos remotos. En la vertiente aragonesa de la montaña se encuentra el Santuario de Nuestra Señora del Moncayo, de donde parten muchas rutas a su cima y cerca, el Monasterio de Veruela, del siglo XII, que inspiró a Gustavo Adolfo Bécquer. En el lado soriano Antonio Machado ambientó alguna de sus obras, como los hijos de Alvargonzalez. Esta montaña custodia a sus pies los viñedos regulados por la Denominación de Origen Campo de Borja. Vides que generosamente regalan sus frutos a unas bodegas que mantienen cierto carácter místico entre barricas impregnadas de silencio. Sabiduría y tradición de los grandes elaboradores de la zona conservadas a lo largo del tiempo. Fusión entre progreso y ancestrales costumbres que refuerzan el carácter de la zona y de sus gentes: amabilidad, generosidad y honestidad, los mismos calificativos que pueden otorgarse a sus vinos.
Bodegas Ruberte, tras más de medio siglo de andadura, sigue siendo una de las pocas bodegas de Aragón que continúa trabajando artesanalmente el proceso de maduración del vino. Sus caldos se elaboran por el sistema tradicional en depósitos de madera de roble y la crianza se sazona en barrica de roble de 220 litros. Las bodegas deben su nombre al empresario que las fundó, Andrés Ruberte, quien al regreso de unos cursos de enología en Barcelona en 1948, comenzó la elaboración de vinos en las bodegas del pueblo. En poco tiempo consiguió unos caldos de gran prestigio que se fueron comercializando en los pueblos de alrededor y que pronto alcanzaron gran éxito. Una de sus hijas, Susana Ruberte, se incorporó a la bodega en 1982, tras finalizar sus estudios de enología y comenzó a elaborar vinos con la Denominación de Origen Campo de Borja. Hoy en día, Susana y su hermano Félix gestionan la empresa que cuenta con 24 hectáreas de viñedo de las variedades Garnacha, Tempranillo, Merlot, Syrah, Cabernet Sauvignon y Macabeo. La bodega de fermentación está formada por 14 depósitos de madera donde se realizan los vinos. Una parte de estos caldos se comercializan como "vino joven" y el resto pasa a la bodega de Crianza, formada por 300 barricas de roble francés y americano. Las diferentes maderas consiguen distintos matices. Finalmente el vino se deposita en los botelleros, en los que reposa hasta terminar su maduración.
Bodegas Ruberte comercializa sus productos con las marcas Ruberte y Aliana -línea femenina-, tanto en España como en el mercado internacional, donde Alemania y Estados Unidos se han convertido en clientes de lujo de esta empresa familiar. Por su parte, La Magallonera, es una marca que fue creada en 1948 y que se dedica a la elaboración de licores artesanos, de aguardientes, de orujo, hierbas, limón, de Brandy, de licores de frutas -mora, fresa, café, guindas…-. También a la elaboración de crema de anís para el pacharán, de moscatel vino de licor y de Vermouth, cuya elaboración sirvió de argumento para uno de los capítulos de la famosa serie de televisión "Un país para comérselo".
Es el Enoturismo un sector en auge y Bodegas Ruberte una visita obligada si recorremos el histórico Reino de Aragón. Visitar estas bodegas es una experiencias más que recomendable tanto para el amante de la enología como para el viajero que simplemente desea degustar el mejor fruto de una tierra que se muestra tan generosa a la hora de ofrecer unos vinos que -damos fe de ello- van más allá de lo sublime. Conocer todo el proceso de recepción de la uva, vinificación y hacer una ruta por las tradicionales cavas subterráneas es una experiencia inolvidable. Si además tenemos la suerte de ser acompañados en la visita por alguno de los encantadores miembros de esta familia, comprobaremos que pasear entre sus barricas, oler el vino mientras envejece, degustar sus distintas elaboraciones y en definitiva, comprender los secretos de este oficio, nos convertirá en testigos únicos de una tradición milenaria: la elaboración artesanal del vino en una tierra que reparte sus frutos por el mundo para que se obre un milagro cada vez que se descorche una de sus botellas.
Bodega Ruberte
C/ Tenor Fleta, s/n
50520 Magallón (Zaragoza)
Tel. (+34) 976 858 106
info@bodegasruberte.com
©Manuel Medina
Escritor y Viajero
