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MONTELIRIO, EL HOTEL SOÑADO





















Manuel Medina. Ronda. Mayo de 2014.

He buscado por todas partes la ciudad soñada, y al fin la he encontrado en Ronda"
Rainer Maria Rilke


Cuando en 1912 Rainer Maria Rilke –considerado uno de los poetas más importantes en alemán y uno de los grandes de la literatura universal–, llega a Ronda, escribe y describe de forma tan certera la ciudad, que no nos podemos resistir a citar su visión de la misma: “... el incomparable fenómeno de esta ciudad, asentada sobre la mole de dos rocas cortadas a pico y separadas por el tajo estrecho y profundo del río, se correspondería muy bien con la imagen de aquella otra ciudad revelada en sueños. El espectáculo de esta ciudad es indescriptible, y a su alrededor, un espacioso valle con parcelas de cultivo, encinas y olivares. Y allá al fondo, como si hubiera recobrado todas sus fuerzas, se alza de nuevo la pura montaña, sierra tras sierra, hasta formar la más espléndida lejanía... por eso fue un maravilloso acierto haber dado con Ronda, en la cual se resumen todas las cosas que yo he deseado: una ciudad española atalayada de un modo fantástico y grandioso...".

Rilke, que  atravesaba el mundo recorriendo caminos cargado con su maleta llena de poemas, al llegar a Ronda quedó seducido. Cien años después, el citado texto mantiene toda su fuerza y son muchos los que al igual que Rilke quedan subyugados por similar seducción que la que cautivó al poeta. Pero hay algo que sí que ha cambiado. El viajero que desee dejarse enamorar por esta ciudad puede no sólo –que ya es mucho– recorrer las calles de una de las ciudades españolas más impresionantes que existen, sino además disfrutar de una de las experiencias de alojamiento y gastronomía del máximo nivel: las ofrecidas por Hotel Montelirio.

El Hotel Montelirio se ubica en pleno centro de la Ronda monumental. Declarada en 1966 Conjunto Histórico-Artístico, la ciudad, de origen árabe, está repleta de casas señoriales, edificios religiosos y palacios con la armonía propia del paso de los siglos. Una de esas casas palaciegas es la que aloja al impresionante Hotel Montelirio. Edificada en el Siglo XVII conforma uno de los enclaves y –en este caso no es una frase tópica y típica– más privilegiados de la ciudad. Todo aquel que se aloja en el Hotel acabará agotando hasta la saciedad –al narrar la experiencia a sus seres queridos– un término: vistas.

Es tal la ensoñación que produce este hotel –que parece flotar en el cielo de Ronda – que a poco que nos dejemos cautivar por lo contemplado desde todas sus estancias y habitaciones, lleguemos a pensar –de forma algo más que atrevida– que esta ciudad nació y se erigió para ser admirada justo desde este enclave. Pero si luego de perder la vista en la inmensidad, deparamos en lo cercano, comprobaremos que el lujo y el glamur nos envuelven.

La conjunción de lo más exquisito en mobiliario, decoración y servicios, todo ello envuelto por una ciudad que acoge al hotel como parte del tesoro monumental y paisajístico que conforma la propia Ronda, es algo que va más allá de lo sublime. Quizá hayan oído hablar del síndrome de Stendhal, también denominado Síndrome de Florencia. Una sensación provocada por la acumulación de belleza en gran número en un mismo lugar. Un referente de la reacción romántica ante la magnificencia estética. El famoso autor francés del siglo XIX, Stendhal, dio una primera descripción detallada del fenómeno que experimentó en 1817 en su visita a la Basílica de la Santa Cruz en Florencia. Similar sensación sentirán en Hotel Montelirio. Doy fe.

Un hotel con encanto, un rincón para descansar, un sueño sobre el impresionante desfiladero del  Tajo de Ronda. El ambiente cálido y familiar del Hotel Montelirio hace que sus clientes se sientan agasajados como en pocos sitios. El famoso desfiladero del Puente Nuevo de Ronda es el privilegiado lugar que ampara esta bellísima Casa Palacio que se vuelca desde una impresionante altura al río Guadalevín. Sus cuatro estrellas se traducen en servicios de altísimo nivel y comodidad de gran lujo. Un equipo humano de la más alta cualificación y profesionalidad a la par que cordialidad son los artífices de convertir nuestra experiencia en algo sublime. Cuenta además con una piscina al aire libre situada en una antigua alberca de la época Nazarí, un baño turco, habitaciones totalmente equipadas con conexión Wi-Fi gratuita y gastronomía andaluza elaborada a partir de productos de la región que ofrece en su restaurante.

Partiendo del máximo respeto hacia la decoración que tuvo en tiempos la casa señorial del Conde de Montelirio, referente máximo de la estética seguida en todo el hotel, sus zonas nobles y sus habitaciones rezuman estilo y confort. Descansar en la terraza ajardinada, en el bar gourmet o en el Wine Bar, degustando alguno de los magníficos vinos de una bodega con capacidad para más de cinco mil botellas de vino, tras una visita al Desfiladero del Tajo, atravesado por el Puente Nuevo del s. XVIII, a su plaza de toros, que alberga en su interior un museo con una interesante colección de objetos de famosos toreros, a la Puerta de Almocábar, al Arco de Felipe V, a las Iglesias del Espíritu Santo, Santa María y Padre Jesús, al Ayuntamiento, a los Palacios de Mondragón y Marqués de Salvatierra, a las Casas del Gigante y del Rey Moro, a los Baños Árabes, a los Molinos del Tajo, a los Puentes Viejo y Curtidurías… la lista es tan interminable como inabarcable son los paisajes que contempla esta ciudad-atalaya.

Charlar plácidamente en el Salón Maestranza, junto al calor de la chimenea, o en el Salón Cádiz, tras una magnífica cena, es perfecto colofón a una jornada en esta ciudad. El descanso nos espera en sus señoriales aposentos. Las habitaciones dobles poseen una decoración exquisita que invita a la comodidad. Completamente equipadas, poseen forja Rondeña en sus rejas, todas ellas orientadas a la calle principal del noble casco antiguo de Ronda. Contemplar un atardecer desde estas habitaciones es una experiencia inolvidable. La doble superior es una habitación muy amplia y luminosa con todas las comodidades de un hotel de cuatro estrellas. Una cuidada decoración y su bañera de hidromasaje con vistas al Tajo hacen de esta habitación un lugar de ensueño para perderse en los tiempos. Las Suite Ronda, Suite Granada y Suite Marbella son tres habitaciones muy amplias y elegantes, con una cuidada decoración, un luminoso salón y magníficas vistas al Tajo de Ronda. El mobiliario del Siglo XII hará que nos sintamos un viajero de la época romántica de la ciudad.

La excelencia sólo se alcanza cuidado todos y cada unos de los elementos de una experiencia de alojamiento. Es la gastronomía pilar básico de ello. En el Restaurante Albacara del Hotel Montelirio, de un clima muy acogedor y de un variado menú elaborado con los mejores productos de la dieta mediterránea y acompañado de una carta de vinos que intensificarán el sabor de sus recetas, la alta gastronomía no es sinónimo de altos precios. Tanto es así que son muchos los que, alojados en otros establecimientos de la ciudad o que realizan visitas de un día sin estancia, eligen el que a nuestro juicio es uno de los mejores restaurantes no ya de Ronda, sino de toda la comarca. A él, al Restaurante Albacara dedicaremos un reportaje en exclusiva coincidiendo con la presentación de su nueva carta.

Un hotel, al igual que un ser humano, encierra en su esencia un concepto: el alma. En todos y cada uno de los departamentos, desde la gerencia pasando por el restaurante, la recepción, las camareras de piso, el mantenimiento… en todos y cada uno de ellos trabajan hombres y mujeres que suman su alma al alma de un hotel que como Ronda, de soñar… tendría que soñar consigo mismo. Montelirio, el Hotel Soñado. 
     
Hotel Montelirio
C/ Tenorio nº 8, Ronda (Spain)
Tel: +34 952873855
reservas@hotelmontelirio.com



©Manuel Medina
Escritor y Viajero


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