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El Roof Garden del Hotel Emperador de Madrid
Martes, 01 de julio 2014
































Disfruta de una comida de altura en el corazón de Madrid y date un "chapuzón"

La terraza del Hotel Emperador cuenta con una de las mejores piscinas y vistas de la capital madrileña

La terraza del Hotel Emperador es un lugar imprescindible en todas las agendas de los madrileños y sus visitantes, por contar con una de las mejores vistas panorámicas del corazón de Madrid pudiéndolo hacer a remojo dándote un chapuzón en su piscina.

Desde la azotea del Hotel Emperador divisamos toda la Gran Vía madrileña, el Palacio Real, la Casa de Campo y hasta dónde la vista alcance, una ubicación estratégica en la que también podemos disfrutar de una comida de trabajo en un ambiente inigualable de paz y tranquilidad.

El servicio de restauración del denominado "Roof Garden" nos ofrece la posibilidad de degustar una oferta gastronómica de estilo mediterráneo en un menú refrescante para estos días de calor de la temporada estival. A partir de las 14:30 horas, podemos subir hasta la décima planta del hotel y sentarnos a comer mientras contemplamos el skyline madrileño.

Podremos combinar la comida con un chapuzón en la piscina de más de tres metros de profundidad para refrescar la tarde antes de volver a trabajar o pasear por las céntricas calles de Madrid. Un refrescante y relajante momento para continuar de una manera renovada con la ajetreada vida de la capital.

La terraza ofrece solárium con zona de hamacas, conexión WIFI para los huéspedes o clientes que quieran elegir la posibilidad de disfrutar del menú del día, más el acceso a la piscina en el horario establecido por 40€.

Acerca del Hotel Emperador
Construido en 1946, fue renovado por última vez en 2012, haciendo personalizable y, un gran atractivo para los transeúntes, la iluminación de su fachada en plena Gran Vía. Este hotel de 4 estrellas se encuentra ubicado en el número 53 de una de las principales arterias de Madrid, la Gran Vía. Forma parte del edificio Lope de Vega, proyectado por los arquitectos Julián y Joaquín Otamendi, siendo este último uno de los responsables, entre otras obras, del Edificio de Correos de la Plaza Cibeles.

Gracias a su ubicación, clientela y estilo arquitectónico, el Hotel Emperador está considerado como una de las referencias urbanísticas de la capital y, sin duda, fue este hecho lo que permitió que fuera el lugar elegido para la celebración de los actos de clausura del centenario de la Gran Vía.

Cuenta con 232 habitaciones, dos suites y 12 salas para organizar cualquier tipo de evento, ya sea de carácter corporativo o particular, con todo el equipamiento técnico necesario. Además de la propuesta del Roof Garden, durante todo el año es posible disfrutar del Bar del Lobby del hotel.

Para más información: www.emperadorhotel.com  


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