La Posada del Conde, el hotel con encanto del Caminito del Rey
Manuel Medina. Enero de 2017.
El Caminito del Rey se ha convertido en un cotizado destino turístico a nivel mundial. Es frecuente cruzarnos durante su impresionante recorrido no sólo con holandeses, alemanes o belgas, sino con viajeros de lugares tan distantes como Canadá, Corea del Sur, Filipinas, Islandia, China, Japón, Arabia Saudí o Israel, entre muchos otros países, que recorren miles de kilómetros con el único propósito de conocer éste enclave.
Ya en 2015 la prestigiosa guía Lonely Planet situaba al Caminito del Rey nada menos que en segunda posición del ranking mundial de las mejores nuevas experiencias de viaje. Ahí es nada. Para su reinauguración en 2015 -pues ya en 1921 el rey Alfonso XIII presidió la inauguración del embalse al que ofrecía servicio- se necesitó todo un año de trabajo y una inversión de casi seis millones de euros. Tras 25 años cerrado, el recorrido del Caminito del Rey es una experiencia única e inolvidable a más de cien metros de altura colgando del vacío.
Este camino imposible que cuelga de las paredes del Desfiladero de los Gaitanes, cerca de las localidades de Ardales y Álora, se construyó ante la necesidad de un acceso entre los saltos de agua del Gaitanejo y del Chorro. Las obras comenzaron en 1901 finalizando en 1905. Alfonso XIII, rey de España, lo recorrió en 1921 hasta llegar a la presa del Conde del Guadalhorce, para inaugurarla. De ahí su denominación popular de "Caminito del Rey". Una de las partes más espectaculares es la pasarela en el Desfiladero de los Gaitanes, pero todo el voladizo de este camino supuso una muy arriesgada construcción para la época y motivo de admiración.
La distancia total del Caminito del Rey es de 7,7 km., de los cuales casi 3 km. son en las famosas pasarelas adscritas a la pared. El tiempo estimado para realizarlo completo puede oscilar entre 4 y 5 horas. Lo bello y atractivo de este recorrido es que no se trata de un simple paseo. Las pasarelas, el puente colgante a 105 metros de altura y las paredes escarpadas conforman una experiencia brutal de turismo activo en un medio natural.
En cuanto al alojamiento y la gastronomía sin duda la mejor opción es el hotel boutique que se encuentra junto al acceso del Caminito del Rey: Hotel Mesón La Posada del Conde. Su ubicación es perfecta y su marco incomparable. Situado junto a los embalses del Conde de Guadalhorce, Guadalhorce y Guadalteba, rodeado de naturaleza, posee muchas posibilidades para la práctica de todo tipo de actividades al aire libre, como pueden ser senderismo, mountain bike, rutas 4x4, observación de aves, vuelo libre, actividades acuáticas, fotografía, y un largo etcétera. Pero lo más importante es que es punto de partida para la experiencia del Caminito del Rey: se encuentra a sólo 500 metros de su acceso norte y el propio hotel se ocupa de gestionar los pases.
El ambiente acogedor de La Posada del Conde constituye un destino por sí mismo. Un lugar donde la comodidad y el confort están asegurados. Su decoración rústica le aporta calidez y sabor a tradición. Las amplias zonas de estar proveen de rincones donde la paz al calor de una chimenea en invierno o frescas zonas donde conversar las tardes de verano serán momentos a recordar tras nuestra estancia. No pasarán desapercibidas las fotografías del año 1900 en adelante que cuelgan de varias de las estancias y pasillos. Impresionante testimonio gráfico de las obras de ingeniería tan avanzadas para la época que se llevaron a cabo en este lugar. Las habitaciones son amplias y confortables, perfectamente equipadas y con impresionantes vistas a la sierra, algunas equipadas con jacuzzi o bañera de hidromasaje.
Y si el hotel es un destino es sí mismo no lo es menos su restaurante. Muchos malagueños acuden a él para degustar la gastronomía de esta comarca y como no, los visitantes de infinidad de nacionalidades se alojen o no en el propio hotel. Mesón La Posada del Conde aúna los platos típicos del terreno con la mejor calidad y el mejor precio. Recetas tradicionales cuyas elaboraciones parten de la selección de los mejores productos de la zona. Su decidida apuesta por la excelencia gastronómica les ha llevado recientemente a obtener los galardones de la Cámara Oficial de Comercio, Industria y Navegación de la Provincia de Málaga, así como de la Academia Gastronómica de Málaga. Suman a ello hace unos meses el premio "Gastromía 2016" otorgado por Daily Tourist Marbella, como "Mejor Restaurante y Chef del Interior de Málaga". No en balde este lugar es elegido para la realización de muchos eventos y celebraciones pues junto al enclave e instalaciones, su oferta culinaria es exquisita.
Hay lugares donde, a poco que observemos, aparecerán nombres propios que son los que les dotan de alma. En este caso, decir Posada del Conde es decir Miguel Ángel González Rodríguez. "Entre rocas y piedras vivas las aguas bravas descansan de su agitado camino. De tu agitado camino descansa, come y bebe, viajero infatigable, que en La Posada te espera un gran amigo". Estas palabras aparecen en la portada de la carta del restaurante y son toda una declaración de intenciones de Miguel Ángel González. Su padre llegó en 1954 con motivo de la construcción de las dos nuevas presas, y poco a poco fue edificando una "venta" que acabó por llamarse "Oasis", a sugerencia de un viajero finlandés que desembarcó en tan perdido paraje en esos tiempos en los que no había apenas senderos. En los 70, siendo aún un niño, Miguel Ángel ya hacía sus pinitos como camarero en este restaurante. Los que venían de todas latitudes buscaban la aventura de un Caminito del Rey ya muy deteriorado, tanto que tuvo que cerrarse en 1975. Pese al cierre, muchos aún se aventuraban a recorrerlo, no sin cierto riesgo. En los 80 el camping alrededor del pantano comenzó a atraer visitantes, lo que supuso un resurgir de la zona.
Miguel Ángel cursó estudios en esa época en lo que aún es, junto a la hotelería y la restauración, una de sus grandes pasiones: la mecánica de automoción. Distintas publicaciones especializadas del mundo del motor cuentan con él para sus test de pruebas de los nuevos vehículos que salen al mercado. Con orgullo muestra su colección de autos de distintas épocas a poco que le sea sugerido. Poco a poco Miguel Ángel cogió las riendas y ya en 1976 estaba al frente de este negocio, siendo aún un muchacho. Desde entonces y hasta ahora todo fue esfuerzo. Los malos momentos afortunadamente fueron dando paso a tiempos mejores. Las ampliaciones e inversiones en su proyecto, pero sobre todo el tesón y la pasión han desembocado en lo que es hoy Hotel Boutique La Posada del Conde, el hotel con encanto del Caminito del Rey.
Hotel Mesón La Posada del Conde
Presa de Guadalhorce, s/n. Ardales, Málaga (España)
Hotel: (+34) 952112411 / (+34) 952112511
Restaurante: (+34) 951010529
reservas@hoteldelconde.com
